Situada sobre un acantilado en la punta del Ambolo, a 105 metros sobre el nivel del mar, frente a la isla Descubridor
Su construcción se remonta al año 1553, fue una de las primeras ordenanzas del Resguardo de la Costa, dictadas por el Duque de Maqueda, Bernardino de Cárdenas, el 24 de Julio de ese año se envía al Concejo de Jávea la orden de construcción de la torre.
Su función principal era “descubrir” la isla del mismo nombre, escondrijo constante de naves berberiscas, y controlar el tramo de litoral entre el Cap de la Nau y la Punta de Moraira, con especial atención a la cala de la Granadella.
No tenía atajador, aunque uno de los 3 soldados de la torre debía situarse en el Cap de la Nau durante las horas de sol.
Se trata de una torre vigía de cuerpo cilíndrico alamborado, voluminosa y poco alta, 8 metros, si la comparamos con el resto de torres construidas en el siglo XVI, en el lugar donde se levantó no necesitaba más altura. En cuanto al interior debió contar con una base maciza y un piso rematado en bóveda sobre la que se forma la terraza.
Problemas estructurales obligaron a la construcción de una plataforma cuadrangular formada por 4 espolones piramidales que reforzaban la base. Descripción constructiva Construida en mampostería irregular, de origen local, dispuesta en hiladas horizontales y recogida con mortero de cal y grava de tonalidad blanquecina.